Como parte de la Semana de la Ciencia y la Innovación, el Centro Nacional de Sanidad Ambiental (CNSA) del ISCIII se suma a las diversas actividades que los centros del ISCIII están organizando estos días, con una jornada de visita a sus instalaciones y unidades, situadas en el Campus de Majadahonda del Instituto, celebrada este miércoles.
Los protagonistas de la jornada han sido los alumnos del Instituto de Educación Secundaria Margarita Salas, de Majadahonda (Madrid), que han podido conocer de primera mano el trabajo de los investigadores del centro, que se dedica a estudiar, evaluar y medir la exposición de la población a la contaminación medioambiental.
El centro alberga el Laboratorio Nacional de Referencia de Calidad del Aire y el patrón Nacional de Ozono, además de ser laboratorio autorizado por el Consejo de Seguridad Nuclear para labores de dosimetría Personal externa en instalaciones radiactivas. También realiza tareas de biomonitorización y análisis de contaminantes químicos y de sus metabolitos en muestras humanas, entre otras investigaciones.
A lo largo de la visita, los participantes han conocido las instalaciones y líneas de investigación de los departamentos de Radioprotección, Calidad del Aire y Toxicología Ambiental. La directora del centro, Argelia Castaño, ha saludado a los alumnos y les ha explicado brevemente el funcionamiento del centro, antes de dar paso a las explicaciones de los científicos de las diferentes áreas del centro.
La investigadora Elena Veiga ha explicado el trabajo de su equipo sobre las mediciones de radón en viviendas y puestos de trabajo, y sobre las investigaciones en torno a radiaciones no ionizantes ampos electromagnéticos. Su compañera Arancha Sanchís ha continuado las explicaciones sobre relación entre electromagnetismo y sistemas biológicos, mientras que Jorge Moracho ha hablado a los alumnos del uso de dosímetros para la medición de radiaciones ionizantes.
Saúl García, del Área de Contaminación Atmosférica, ha introducido la importancia de medir y controlar los contaminantes del aire, y ha señalado que es fundamental la obtención y la traducción de los datos obtenidos para evaluar los riesgos para la salud pública. Ana Cañas, del Área de Toxicología Ambiental, ha tratado el análisis de biomarcadores en relación a la posible influencia de mortales pesados, como el mercurio, el plomo, el cadmio y el arsénico.
Finalmente, Mercedes Núñez, que trabaja en ensayos con algas y peces para analizar el impacto en medio ambiente de diferentes productos, ha hablado sobre la influencia de los niveles tróficos (distribución y comportamiento de los diferentes organismos vivos dentro de la cadena alimentaria de la naturaleza).
A lo largo de las charlas y la visita, los alumnos han tenido la oportunidad de preguntar e interesarse por estas investigaciones, solucionando sus dudas en cuestiones como la exposición a productos tóxicos y la relación entre niveles de contaminación y riesgo para la salud pública, entre otros.
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